Una de las obras más escalofriantes de los últimos tiempos.
Un microespacio, un actor y efervescente creatividad. Con estos elementos Rodrigo Cortés nos acerca al verdadero espíritu del Thriller.
La trama tiene como protagonista a Paul Conroy, contratista norteamericano que despierta enterrado en un ataúd de madera debajo del suelo arenoso de Irak con un teléfono móvil, un mechero y algunas sorpresas.
Nos encontramos con una muy interesante interpretación de Ryan Reynolds que durante los agónicos 90 minutos que dura la filmación, nos hará sentiremos presa de la oscuridad y la asfixia.
El ritmo es trepidante,no decae en ningún momento. El guión de Chris Sparling nos acerca a la mejor literatura de Stephen King y la dirección a un inspirado Hitchcock. También merece atención especial el perfecto trabajo de sonido.
Abstenerse claustrofóbicos….
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